Algunas nos recuerdan eventos del pasado, pero la mayoría de las que “celebramos”, tienen nombre y apellido. Algunas, intentan que recordemos próceres de todos que los colores pretenden adoptar. Próceres que vuelven a morir por indiferencia. Otras, nos son ajenas. Algunas impuestas para recordar hechos que no nos corresponden. Después de todo, para un día “libre” no hace falta voluntad. Voluntad hace falta para levantarse… y trabajar. La excusa de que, “eso no me lo enseñaron en la escuela”, no nos basta hoy. Tiempos estos donde, en el estante en que se colocada la enciclopedia Salvat comprada en Supermercados Pueblo en algunos casos, o la Británica, en el caso de los mas privilegiados, existe hoy un letrero que dice “Google-it!”. No hay excusa para el desconocimiento.
En específico, el caso del día de los presidentes, que anteriormente se le conocía como el día de Washington, estoy de acuerdo. Supongo que para muchos, Washington es solo la cara que aparece en los billetes de a uno. Sabio quien lo cambio a ser el Día de los Presidentes. Así, uno celebra el que prefiere y por la razón que quiere. Por ejemplo, en los tiempos de mi abuelo, mucha gente en PR tenía una foto de Roosvelt en la sala de la casa. En ocasiones, al lado de un cuadrito con el rostro de Jesucristo, no se si era que por ser aquellos tiempos de guerra – como lo son aun – para que cuando se le rezara a uno por el regreso de sus hijos sanos y salvos, el de al lado escuchara… Otros, en el tiempo de mis padres eran locos con Kennedy. A este lo apreciaban por muchas razones, por guapo y joven algunas, por jodedor otros o por librarnos de una catástrofe nuclear los demás. A Nixon hay que reconocerle que tuvo la valentía de reconocer sus errores. Cosa que ningún político del patio ha hecho nunca. A los nuestros, los imagino cuando reciben el sacramento de la reconciliación diciéndole al padre, “perdóneme padre pero yo no peco” a lo que el padre responderá, “Ave María Purísima…”. Otros celebraran a Clinton, tal vez por el tema económico, tal vez por sus interpretaciones con el saxofón y otros por sus interpretaciones con el sexofon, o sea, el cigarro de Mónica. Tengo que admitir que siempre me quede con la duda si el cigarro era un corona, un robusto o un torpedo – los cigarros se nombran por su diámetro y largo, si te quedan dudas, Google-it! -… Yo por mi parte celebro, que el niño engreído de papa, Jorge W. Matojo ya no este en la casa blanca, desgraciados ocho años en que paso mucho y no paso nada. Y del incumbente no sabemos nada aun, pues el político, sino la caga a la entrada, la caga a la salida…
En específico, el caso del día de los presidentes, que anteriormente se le conocía como el día de Washington, estoy de acuerdo. Supongo que para muchos, Washington es solo la cara que aparece en los billetes de a uno. Sabio quien lo cambio a ser el Día de los Presidentes. Así, uno celebra el que prefiere y por la razón que quiere. Por ejemplo, en los tiempos de mi abuelo, mucha gente en PR tenía una foto de Roosvelt en la sala de la casa. En ocasiones, al lado de un cuadrito con el rostro de Jesucristo, no se si era que por ser aquellos tiempos de guerra – como lo son aun – para que cuando se le rezara a uno por el regreso de sus hijos sanos y salvos, el de al lado escuchara… Otros, en el tiempo de mis padres eran locos con Kennedy. A este lo apreciaban por muchas razones, por guapo y joven algunas, por jodedor otros o por librarnos de una catástrofe nuclear los demás. A Nixon hay que reconocerle que tuvo la valentía de reconocer sus errores. Cosa que ningún político del patio ha hecho nunca. A los nuestros, los imagino cuando reciben el sacramento de la reconciliación diciéndole al padre, “perdóneme padre pero yo no peco” a lo que el padre responderá, “Ave María Purísima…”. Otros celebraran a Clinton, tal vez por el tema económico, tal vez por sus interpretaciones con el saxofón y otros por sus interpretaciones con el sexofon, o sea, el cigarro de Mónica. Tengo que admitir que siempre me quede con la duda si el cigarro era un corona, un robusto o un torpedo – los cigarros se nombran por su diámetro y largo, si te quedan dudas, Google-it! -… Yo por mi parte celebro, que el niño engreído de papa, Jorge W. Matojo ya no este en la casa blanca, desgraciados ocho años en que paso mucho y no paso nada. Y del incumbente no sabemos nada aun, pues el político, sino la caga a la entrada, la caga a la salida…
El asunto es, que precisamente ese fin de semana, en PR proclamamos que comienza el verano. No nos importan los solsticios o los equinoccios que definen las estaciones. No nos importa el calendario escolar. Solo nos bastan unas preguntas sencillas. ¿Esta buena el agua? ¿Esta caliente el sol? ¿Están frías las cervezas? Pues vámonos para la playa…
Playa, para mi, es sinónimo de BBQ. Así que dedicare, en este verano próximo a comenzar, algunas entradas sobre este tema. Después de todo, quien se resiste a una buena barbacoa.
Bueno Juanci, eres tremendo siempre tienes un buen tema que analizar, este esta buenisimo, aunque fuiste un poco diplomatico con algunos presidentes, fue genial tu observacion, sigue escribiendo que buscare el proximo, felicitaciones, espero mas recetas, TQM
ResponderEliminar